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Neko, el diseño mexicano que conquista el mundo

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Neko, el diseño mexicano que conquista el mundo

Nov 20, 2020

Son los autores de las luminarias, bancas y señaléctica de los Bosques de Chapultepec y Aragón y de los innovadores biciestacionamientos Pantitlán, La Villa y La Raza, y por ellos han recibido los más prestigiosos premios de diseño en el mundo. A punto de intervenir en los sistemas de transporte público de Colombia, Daniel Olvera y Karime Tosca –dos de los cuatro socios de Neko– hablan de los retos y gajes de diseñar mobiliario urbano para las ciudades de hoy.

 

Por Georgina Hidalgo Vivas

Su primer producto a escala pública fue una luminaria, "el elemento lúdico institucional" que donaron al Programa de Rescate de Espacios Públicos en 2008 para usarse en todos los parques a nivel federal. Era un diseño libre, abierto a todos los proveedores por cuestiones de obra pública y transparencia, así fue como Daniel Olvera y Karime Tosca, Hiroshi Kenaga y Alice Pecman, fundadores de Neko Diseño, comenzaron a fabricarlo y a colocarlo por todos lados.

Pronto llamaron la atención de despachos de arquitectura y de paisaje, como GDU, del arquitecto natural Mario Schjetnan, quien los integró a la primera etapa de rehabilitación del Bosque de Chapultepec y con su mobiliario y señalizaciones ganaron el Premio del jurado de la Sociedad Europea de Diseño Gráfico, en 2009. Ahí les hicieron "observaciones interesantes", entre ellas "el gran impacto por todo lo que se logró con un recurso tan reducido para un bosque urbano de tanta relevancia histórica".

"Trabajar con recursos "reducidos", ésa es quizás la ventaja más grande de los diseñadores mexicanos", creen Olvera y Tosca, quienes en ausencia de sus otros socios presumen orgullosos a sus "hijitos urbanos" en su cuartel general de la Condesa.

BCTK: ¿Presupuesto reducido?

DO: Bueno, si piensas que todo el programa de mobiliario urbano (del Bosque de Chapultepec) fue de 8 millones de pesos para 100 hectáreas y que ellos (los europeos), hacen presupuestos de 20 millones de dólares para un parque de dos hectáreas, pues les pareció sorprendente la calidad del proyecto y la intervención con tan poco.

BCTK: Luego vinieron los bosques de Aragón y los Viveros de Coyoacán.​ Ya son trece años dejando su huella en la ciudad, ¿cómo le hicieron? 

KT: En nuestra página fuimos publicando los trabajos que habíamos hecho y de pronto nos empezaron a preguntar ¿cuánto cuesta el bote de basura del proyecto tal?¿ y que la banca de tal? Nos dimos cuenta que a los constructores le gustaban los diseños que estábamos haciendo y dijimos tenemos la experiencia, hemos participado en proyectos de relevancia histórica y urbana, vamos sacar nuestra propia línea de mobiliario urbano, que además tiene diseño, está hecha en México y tiene este perfil de cuidado del medio ambiente, y la sacamos.

BCTK: ¿No hay empresas de este tipo en México?

DO: Cuando empezamos habíamos encontrado como cinco o seis, ahora hay muchas más, pero tristemente y es algo que debo decir, muchas lo que hacían era copiar diseños de otros lugares y los tropicalizaban para venderlo aquí. Nosotros dijimos cómo hacemos algo que sea tan bueno que podamos llevarlo afuera de México. Ese era el reto. Que tuviera mucha calidad, diseño y estuviera bien pensado para durar para aspirar a vender más allá de México.

BCTK: ¿Como es el proceso creativo de diseñar entre cuatro socios?

K: Pues hay lluvia de ideas, nos gusta que cuando se rebota de tal forma cada diseño que al final no sabes quien es el autor. Siempre decimos el autor es Neko, el equipo es todo.

DO: Nos gusta que sea así, porque en este mundo del diseño hay mucho eso del nombre del diseñador, pero nosotros queríamos crear una marca.

BCTK: ¿Cómo sería la Ciudad de México idealmente diseñada?

DO: Yo soñaría una en la que pudiéramos caminar libremente sin preocuparte por la calidad del aire, por si corres peligro por los vehículos, de verdad poder disfrutar de la calle. Me gustaría sentirme tranquilo y que mis hijos puedan disfrutar de la ciudad, sólo así te das cuenta que sí hay que volverse a otro lado por los niños. Queda mucho por hacer, pero sí hay que quitarle hegemonía al automóvil, en parte por eso estamos en los biciestacionamientos es nuestro granito de arena.

BCTK: ¿Cómo surgió la idea de los biciestacionamientos?

KT: Siempre hemos tenido esta motivación "verde", con esta idea de ocupación (no solo preocupación) por el medio ambiente. Así que dijimos vamos a hacer algo que ayude a que la ciudad sea transitable y fomente la bici, por eso sacamos los aparcabicis a ras de piso, sentíamos que les faltaban a la ciudad. Luego se acercaron los de Sedema y nos dijeron "Vamos a hacer un estacionamiento masivo y necesitamos que quepan la mayor cantidad de bicis y que la gente las estacione sin que las tenga que cargar y que dure mucho tiempo". Lo aceptamos, ¿cómo dices que no? Esas son las cosas que más nos mueven, los retos, es una oportunidad enorme y, o dices que sí o no sabes quién lo va hacer y cómo.

DO: Y ahí salió el "pero lo tienen que tener en quince días y con el precio". Ahí se nos ocurrió hacer un biciestacionamiento asistido, que son estos que están en la Raza y Pantitlán, que tienen mecanismo donde atoras la llanta y jalas una palanca y te asiste y la sube. Y con esto logramos optimizar al máximo el espacio, cupieron 400.

BCTK: ¿Sabían que serían un hitazo?

DO: Para nosotros es un orgullo porque todo el desarrollo lo hicimos aquí. Pasamos por mecanismos con contrapesos, casi de laboratorio de pruebas y llegamos a la solución más sencilla de utilizar. Lo mandamos al politécnico a hacer pruebas de resistencia de 10 mil ciclos y las aguantó. Diez mil ciclos sin cambios en la forma. Y a la fecha, desde 2012, ahí siguen.

KT: Al principio hubo una curva de adaptación con esos, algunos resultaron dañados por no saber usarse, pero después dijimos vamos hacer uno que no necesite instructivo.

BCTK: ¿Y ya lo logaron?

DO: Sacamos el del doble piso, que tiene una rampa que se jala para que ruedes la bici al riel y la sube sin tener que cargarla. A la hora de registrarlo y hacerle las pruebas, el abogado dice "Pues busquen la patente" e hicimos la búsqueda y no existe nada en el mundo igual. Nos recomendaron la patente internacional y ahorita estamos en eso. Ya está la patente en México y estamos abriendo mercado afuera.

KT: Siempre nuestro diseños como son originales, los registramos ante IMPI o derechos de autor porque hemos aprendido a desconfiar a la mala.

BCTK: ¿Se los han tratado de robar?

KT: De copiar los diseños sí. Antes solo se le copiaba al extranjero, ahora a nosotros. Entonces siempre estamos adelante viendo qué más, cómo mejorar lo que hemos hecho, qué otras cosas nuevas hacer.

BCTK: ¿Sus aparcabicicletas han ganado todos los premios de diseño?

KT: Tenemos cuatro premios, entre ellos la Bienal Nacional de Diseño, que es el máximo premio en la República Mexicana. También ganamos el bronce en 2017 de los European Product Design Award y el año pasado  (2018) la Bienal iberoamericana de Diseño, al mejor diseño de producto. En la categoría de diseño social, la revista Obras premió el biciestacionamiento de la Villa y reconoció al despacho como uno que genera proyectos inteligentes, porque no solo integramos los biciestacionamientos sino uno de capacidad mediana, con software semiautomatizado para acceso de las personas y todo eso.

BCTK: ¿Qué sigue para Neko?

DO: Queremos seguir sacando otras líneas de mobiliario que se ajusten a más necesidades, seguimos probando con muchos materiales, ahora mismo nos hemos involucrado en proyectos especiales de cosas muy específicas para ciertos lugares y lo que queremos es llevar lo que hacemos al resto del mundo.

BCTK: ¿Hasta que se los copie IKEA?

DO: Sí, ese es el punto.

Lo que sucede en México es que no hay una cultura de propiedad intelectual, la gente no sabe que está haciendo mal, para muchos personas es normal ver diseño y copiarlo, en muchos lineamientos de obra publica vienen nuestros diseños especificados y el arquitecto dice "me gusta" y lo pone, pero cuando llega a la obra el constructor dice "Ah, pos mejor las hago yo".

KT: Creo que no existe esa idea de que hay derechos de propiedad intelectual y tu ganancia viene porque invertiste en un desarrollo antes. Al copiarlo perdemos todos, las empresas que desarrollan cosas nuevas ¿con qué confianza lo hará si alguien lo usa y lo vende más barato? Y esas empresas copionas difícilmente abrirán mercado. Es un reto para todos crear cosas nuevas.

BCTK: ¿Es un cumplido para ustedes que los busquen en el extranjero para hacer algo bonito y útil?

KT: Vienen de Colombia, que están haciendo en equivalente del Metrobús allá, el Transmilenio, y nos dicen:

"Queremos que ustedes hagan una propuesta para Colombia porque en México se están haciendo los biciestacionamientos del futuro", ustedes están diez años adelante. Y eso fue muy bonito porque nos reconocieron. Sí, es un cumplido.

BCTK: ¿Esta ciudad te obliga a pensar en cosas que no solo es diseño, como el vandalismo y el nivel educativo de la zona donde estará tu mobiliario?

DO: Pues sí, es el reto porque lo queremos es que la gente pueda vivir más cómoda, tenemos esa responsabilidad o los mecanismo para hacer la vida fácil. Creemos que es mejor regresar a lo básico. Pensar como hacer tu casa para que se ventile sola y ilumine sola en vez de ponerle aire acondicionado y panel fotovoltaico si puedes aprovechar los elementos naturales de mejor manera. Hay que regresar a esas cuestiones.

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