Un Café Por la Seguridad Vial con Mariel Yee

Es cicloactivista en Culiacán y nos dice por qué es el segundo de los 30 municipios más letales para peatones y ciclistas en México

Por Georgina Hidalgo Vivas

Ser mujer, peatona y ciclista en una ciudad donde el automóvil se venera como EL símbolo máximo de estatus social y las calles se consideran una pasarela de machos "quema llanta", solo se explica por el espíritu rebelde de las culichis. Mariel Yee, coordinadora del colectivo Mujeres en Bici Culiacán e Integrante de Pro-Ciudad, es una de estas jóvenes guerreras que sin importar la violencia de las trocas y los narcos se mueve para que en Culiacán todos puedan disfrutar el espacio público.

Así lo contó en la charla "Un café por la seguridad vial", que organiza cada viernes la Coalición Movilidad Segura (@CoalicionMS), para acompañar el dictamen de la primera Ley General de Movilidad y Seguridad Vial de México en el Senado de la República. 

A sus 23 años, 8 de los cuales los ha dedicado a la defensa de los derechos humanos, Yee ha promovido desde rodadas de mujeres hasta la arborización, la construcción de ciclovías emergentes durante la pandemia y la adopción políticas públicas en favor de una ciudad más transitable y accesible. Pero en Sinaloa y su capital Culiacán hay una resistencia al cambio anquilosada por parte de los tomadores de decisiones.

"Cada vez hay más irregularidades para construir calles con banquetas porque a los tomadores de decisiones les cuesta trabajo entender que se necesitan. La mayoría de ellos son hombres de avanzada edad, que arrastran ideas que hoy nos hacen tener las calles que tenemos, sin banquetas, sin cruces peatonales, sin tomar en cuenta las necesidades de las personas con discapacidad o de las mujeres, que requieren espacios seguros, exclusivos y bien iluminados", asegura.

Alerta de seguridad vial 

Por los altos índices de feminicidios y violencia en Culiacán se declaró la alerta de género desde el 2017. Se supone que con ella los tres niveles de gobierno deben coordinarse para actuar y establecer mecanismos para erradicarla, pero según Yee, en las calles se vive una verdadera alerta de seguridad vial. Por si esto fuera poco, el ser ciclista también tiene sus bemoles en la capital culichi.

"Aquí te dicen los ciclistas son unos salvajes, vienen en las banquetas, pero no entienden que lo hacen porque no hay condiciones para circular seguros en las calles. En Culiacán tenemos usuarios de la vía en autos a gran velocidad porque es una forma de reafirmación de masculinidad, si no "quemas llanta", si no vas a gran velocidad en las calles y si no eres ruidoso o te haces visible, no eres hombre. Es un tema que no se discute, pero que incide en la salud pública".

También entre los legisladores y legisladoras sinaloenses se cree que no se usa la bici por el extremo calor, pero no es así. De hecho, como en todos lados, el uso de la bicicleta repuntó durante El Gran Encierro.

"No es un tema del clima o de si no hay ciclovías. Más que sobre el narco, los sinaloenses queremos hablar de seguridad vial, muchos niños mueren en las calles atropellados y sí tiene relación con el hecho que somos la ciudad con más autos por familia. Estamos promoviendo un uso desmesurado del auto porque no tenemos un transporte público eficiente, además de alimentar la idea de que solo los pobres se transportan en bici". 

Sin satanizar las cuestiones sociológicas del estado, lo cierto es que en Sinaloa la gente se mueve como puede. Activistas como Yee están buscando condiciones más agradables para hacerlo.

"El 67 % de la población en Culiacán se mueve en transporte público, y aún así todo el recurso se destina al automóvil privado, es un tema ya de derechos humanos. Es un trabajo muy fuerte de puntuar y no es que sea una moda de juventud, va a ser complicado, pero hay que aprovechar el momento porque no es posible que en una ciudad tan pequeña tardemos ya hora y media en trasladarnos".

Malecón a 80 

La resistencia de la minoría de automovilistas a tener pasos peatonales a nivel banqueta tuvó su punto culminante hace unos años, cuando se retiró del Malecón de Culiacán un cruce para privilegiar la circulación a 80 km/h.

"Somos de las pocas ciudades en el mundo que en vez de tener una zona peatonal para el disfrute de todos, es una vía rápida de 80 km/hora, a pesar de que pasa por escuelas, dos jardínes de niños y preparatorias. Fallamos en decir NO a alternativas que siguen alimentando la idea de la velocidad.​", dice la activista

"Diferencias que friegan a todos"

Las diferencias políticas entre las autoridades del estado y el municipio ocasionaron no solo la nula socialización de los beneficios de los proyectos ciclistas o peatonales sino la falta de acuerdos institucionales, por eso hubo esfuerzos aislados de sistemas de bicis públicas en Mazatlán y Aome, pero en Culiacán no. De hecho, cuando en la pandemia se habló de convertir el centro histórico culichi en peatonal se atravesaron intereses particulares de los comerciantes y no hubo diálogo entre actores relevantes. A nivel estatal, aunque ya hay prioridad en el uso de la bici y hasta existe la Secretaría de Desarrollo Sustentable: 

"Se queda corta porque no tiene una participación relevante en los proyectos y por eso llegan personas con intereses privados que nos vienen a fregar a todos", dice Mariel.

#LeyMovilidadSegura YA

Para la activista es claro lo que debe hacerse: 

"Hay una necesidad de que nuestros legisladores entiendan la seriedad del tema y que debe resolverse con sentido comunitario y con espacios de diálogo de ideas. Que sepan que nuestros ojos están puestos en ellos, que tienen responsabilidades y que no pueden seguir tomando las mismas decisiones esperando otros resultados.

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MIRA LA CHARLA COMPLETA DE MARIEL YEE aquí